Carla Peterson se pone los pantalones largos y sale a la tele. Lejos de sus malas queridas como fueron Brigite en “Son amores” y Constanza en “Sos mi vida”, la actriz de 33 años será protagonista por primera vez en su carrera con “Lalola”. Ella es Lalo y también Lola, ya que su personaje es un hombre a quien le echaron una maldición y se convirtió en mujer. La tira diaria, que irá por América desde hoy y se verá de lunes a viernes desde las 22.30, es una de las apuestas más importantes del canal porteño y una de las pocas ficciones que se verán en la pantalla chica, en un año sobrecargado de aspirantes a famosos encerrados en una casa y de mujeres bailando por un sueño.
“Estoy con una camiseta de Newell’s en la mano”, dice Peterson, casi como excusándose. “Hubiese preferido ser de Central, pero venía en el libro”, destaca tras comentar que su otro yo en la ficción es rosarino. Previo a esta nota, su personaje en versión femenina le trataba de arrancar un beso a Facundo, interpretado por el galán Luciano Castro. “Parece que se va a dejar”, acota sobre esa situación, con un buen humor que mantendrá a lo largo de toda la charla con este diario.
—¿Hay una presión extra por la responsabilidad que implica tu primer protagónico en una tira diaria?
—Eh, un poco sí, más que una responsabilidad una tiene que estar atenta a una historia central, sobre todo ésta, en que todo gira alrededor de estos dos personajes (Lola y Facundo), y esto demanda tal vez un poco más de trabajo, estar un poco más adelantada en las historias y más atenta en la totalidad de la trama.
—¿Es una comedia que pretende alzar una crítica contra el machismo?
—No, enfoca las cosas que pueden suceder cuando una persona se muestra de diferentes maneras. En este caso, el personaje es un hombre y cuando se transforma en mujer empieza a diferenciar la manera de actuar de ambos sexos.
—¿Te costó incorporar movimientos y gestos masculinos?
—Sí, un poco, porque en realidad es el cuerpo de una mujer, entonces se mueve como una mujer, pero por momentos tiene costumbres masculinas, como las maneras de expresarse ante los demás. Pero por sobre todo tiene un conflicto constante con su cuerpo, que de golpe se le mueve de otra manera, entonces trata de no soltar las antiguas costumbres, su manera de caminar, de decir, de pedir, es diferente. A la vez, él era un hombre elegante, estilizado, entonces no es lo mismo que si se tratara de un hombre tal vez un poco mas rústico.
—¿Qué aportará “Lalola” de distinto en un momento en que todo es “Patinando...” o “Gran Hermano”.
—Mirá, cuando “Lalola” empezó este proyecto nunca se imaginó esta competencia. Estaba pensada como una producción para los mercados de telenovelas de otros países y no para salir a competir con la situación actual de la tele. Es una coincidencia que esté en el mismo horario que esos dos programas. Pero creo que ofrece algo más para que quienes gusten de mirar ficción tengan opciones tan divertidas como los realities o los envíos de entretenimiento.
—¿Despegarte de tu rol de mala te permitirá crecer como actriz?
—Sí, la verdad que sí. Hay una vuelta de tuerca en esta historia y a mí me gusta buscar un camino paralelo en mis trabajos. Y si lo consigo, quiero darle otra vuelta más, es más entretenido.
DIARIO LA CAPITAL, ROSARIO
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